Los gustos son subjetivos.
Por eso creemos que el diseño debe estar en función de cumplir objetivos, bajo parámetros coherentes de marca e imagen e identidad. ¿Qué queremos transmitir? ¿Cómo queremos que nos vean? ¿Cuál es nuestro propósito? Siempre hay un trabajo previo antes de desatar la creatividad e imaginación.